Con El Greco, Marisol del Olmo cierra el ciclo “la amiga de la protagonista”,
para enfrentar un nuevo reto en su exitosa carrera en televisión
Pasión, Mañana es para siempre y Soy tu dueña, sus tarjetas de presentación
Una carrera de más de 20 años
Luego de tres telenovelas de gran impacto en Televisa, y una carrera de actuación que comenzó en la infancia, Marisol del Olmo se prepara para la interpretación que cambiará su vida profesional y que tendrá lugar en la próxima serie de Pedro Torres: El Greco.
El trabajo escénico que ha tenido desde que tenía 6 años de edad, comenzó a darle frutos en el 2007, en que participó en la telenovela Pasión, después en 2009 con el melodrama Mañana es para siempre y el año pasado con Soy tu dueña.
Al terminar esta última emisión, según relata la actriz, se sentía satisfecha y muy contenta, sin embargo desde lo más hondo de su corazón pidió que el próximo proyecto fuera totalmente distinto a lo hecho hasta ese momento en su trayectoria. No quería más ser “la amiga” de la protagonista de la historia.
Durante un viaje a Nueva York recibió la llamada esperada: con una excelente participación y excelente proyección, y únicamente se le adelantó que sería con el productor de, entre otras cosas, Mujeres asesinas, Pedro Torres.
Hoy, Marisol del Olmo cuenta ya con el papel de una escritora que entra al grupo policiaco de élite El Greco, su adhesión a este grupo es para escribir una historia, pero sus sentimientos y su pasado empiezan a complicar la situación.
El Greco será una serie policiaca de 13 capítulos que ya inició su preproducción. Según comparte su experiencia, Del Olmo, hace dos días el elenco y parte de la producción tuvieron una visita a las instalaciones de la Policía Federal Preventiva para conocerla.
“Nos mostraron cómo hacen los operativos antisecuestros, de restablecimiento del orden, todo tipo de prácticas, las instalaciones, los hangares con los helicópteros.
Fue una jornada muy interesante y de mucho aprendizaje”, dice Del Olmo.
Para esta intensa actriz, madre trabajadora y mujer tenaz que ha sabido combinar todas las facetas de su existencia para salir adelante con su familia, todo comenzó como un juego, cuando apenas contaba con seis años de edad.
“Todo comenzó –rememora-- así como jugando, estuve en el CEA (Centro de Educación Artística de Televisa) infantil, tuve maestros como Pedro Damián, Juan Carlos Muño y Martha Zavaleta. Yo jugaba a actuar, a tomar clases de canto, de música, y era muy divertido porque en el fondo soy muy introvertida pero el escenario era darme permiso para hacer todo tipo de cosas”.
Su tío Enrique del Olmo la subió a un escenario en el musical Jesucristo Superestrella y ella quedó prendada de ese mundo mágico que posibilita el teatro. Ahí recibe su primer sueldo como actriz, incluso conserva una placa como reconocimiento por la temporada de este montaje cuando ya la actriz Rocío Banquells formaba parte del elenco.
Marisol asegura que aunque le gustaba mucho el mundo de la actuación, su madre, que siempre dio lugar a las inquietudes de su hija, fue firme en el ámbito escolar. Así, al terminar su instrucción preparatoria se integró a montajes del Teatro Insurgentes como Anita la huerfanita, La cenicienta y otros cuentos infantiles.
“Esta etapa fue semi profesional, pero mi carrera no la adopté hasta que terminé el CEA, en una segunda etapa, cuando tenía unos 20 años de edad aproximadamente.
Entonces apliqué para la carrera de Medicina en la UNAM y para el CEA, en los dos me aceptaron y aunque ambas carreras me apasionaban creo que la elección era obvia” bromea la actriz.
Entre los grandes maestros con que contó esta intérprete se encuentran Salvador Sánchez, Rosa María Bianchi, Hugo Argüelles, entre otros. Muy pronto, a los meses de terminar sus estudios en esta escuela se le convoca a una audición para la puesta en escena de la comedia musical Los fantásticos, que protagonizó con Sergio Catalán, Rubén Cerda y Moisés Suárez.
“Ello implicó una gran apertura, se me abría un mundo de posibilidades, porque la verdad no quería estar en los pasillos de Televisa tocando puertas. Ahí empecé a hacer teatro, ahí me empecé a desarrollar como profesional”.
Cuando retoma la televisión participa en Pueblo chico, infierno grande; Serafín, sentimientos ajenos y El privilegio de amar. Después la vida la pone a prueba, enfrenta una separación y se queda sola con su hija en brazos. “Mi ex pareja me apoyó, pero yo no he sido una mujer conformista y tenía que forjar mi propio camino, mi vida propia”, dice.
Marisol recuerda con un nudo en la garganta que el montaje de Regina, un musical en el que participó Lucero, ella se subía al escenario en los ensayos con su hija en brazos: “Isabella se sabía ya los temas… fue un momento muy intenso para mí, lo recuerdo con mucho orgullo porque pudimos hacerlo juntas”.
Al término de esta temporada y en plena labor de madre le llegó un segundo respiro, la telenovela Pasión, con la que su rostro y su carisma empezaron a generar una inercia en la que ya lleva varios años y que ahora la coloca en el momento más importante.
“Me acuerdo –dice emocionada-- que un día me encontré a Mónica Miguel en los pasillos de Televisa, me tomó del brazo, me llevó a hacer la audición y me quedé. Empezamos las grabaciones, pero me cambiaron de personaje y en una semana estaba yo en Colombia vestida de epoca y navegando en un barco”
Hoy empieza a preparar el personaje de una escritora con un perfil psicológico fuerte que se enamorará de uno de los miembros del grupo policial de élite y cuyo pasado detonara una trama interna digna de esta superprodución. Con ello la actriz tendrá la oportunidad de hacer algo que jamás ha hecho, de crecer y proyectar su carrera hacia otros derroteros.
para enfrentar un nuevo reto en su exitosa carrera en televisión
Pasión, Mañana es para siempre y Soy tu dueña, sus tarjetas de presentación
Una carrera de más de 20 años
Luego de tres telenovelas de gran impacto en Televisa, y una carrera de actuación que comenzó en la infancia, Marisol del Olmo se prepara para la interpretación que cambiará su vida profesional y que tendrá lugar en la próxima serie de Pedro Torres: El Greco.
El trabajo escénico que ha tenido desde que tenía 6 años de edad, comenzó a darle frutos en el 2007, en que participó en la telenovela Pasión, después en 2009 con el melodrama Mañana es para siempre y el año pasado con Soy tu dueña.
Al terminar esta última emisión, según relata la actriz, se sentía satisfecha y muy contenta, sin embargo desde lo más hondo de su corazón pidió que el próximo proyecto fuera totalmente distinto a lo hecho hasta ese momento en su trayectoria. No quería más ser “la amiga” de la protagonista de la historia.
Durante un viaje a Nueva York recibió la llamada esperada: con una excelente participación y excelente proyección, y únicamente se le adelantó que sería con el productor de, entre otras cosas, Mujeres asesinas, Pedro Torres.
Hoy, Marisol del Olmo cuenta ya con el papel de una escritora que entra al grupo policiaco de élite El Greco, su adhesión a este grupo es para escribir una historia, pero sus sentimientos y su pasado empiezan a complicar la situación.
El Greco será una serie policiaca de 13 capítulos que ya inició su preproducción. Según comparte su experiencia, Del Olmo, hace dos días el elenco y parte de la producción tuvieron una visita a las instalaciones de la Policía Federal Preventiva para conocerla.
“Nos mostraron cómo hacen los operativos antisecuestros, de restablecimiento del orden, todo tipo de prácticas, las instalaciones, los hangares con los helicópteros.
Fue una jornada muy interesante y de mucho aprendizaje”, dice Del Olmo.
Para esta intensa actriz, madre trabajadora y mujer tenaz que ha sabido combinar todas las facetas de su existencia para salir adelante con su familia, todo comenzó como un juego, cuando apenas contaba con seis años de edad.
“Todo comenzó –rememora-- así como jugando, estuve en el CEA (Centro de Educación Artística de Televisa) infantil, tuve maestros como Pedro Damián, Juan Carlos Muño y Martha Zavaleta. Yo jugaba a actuar, a tomar clases de canto, de música, y era muy divertido porque en el fondo soy muy introvertida pero el escenario era darme permiso para hacer todo tipo de cosas”.
Su tío Enrique del Olmo la subió a un escenario en el musical Jesucristo Superestrella y ella quedó prendada de ese mundo mágico que posibilita el teatro. Ahí recibe su primer sueldo como actriz, incluso conserva una placa como reconocimiento por la temporada de este montaje cuando ya la actriz Rocío Banquells formaba parte del elenco.
Marisol asegura que aunque le gustaba mucho el mundo de la actuación, su madre, que siempre dio lugar a las inquietudes de su hija, fue firme en el ámbito escolar. Así, al terminar su instrucción preparatoria se integró a montajes del Teatro Insurgentes como Anita la huerfanita, La cenicienta y otros cuentos infantiles.
“Esta etapa fue semi profesional, pero mi carrera no la adopté hasta que terminé el CEA, en una segunda etapa, cuando tenía unos 20 años de edad aproximadamente.
Entonces apliqué para la carrera de Medicina en la UNAM y para el CEA, en los dos me aceptaron y aunque ambas carreras me apasionaban creo que la elección era obvia” bromea la actriz.
Entre los grandes maestros con que contó esta intérprete se encuentran Salvador Sánchez, Rosa María Bianchi, Hugo Argüelles, entre otros. Muy pronto, a los meses de terminar sus estudios en esta escuela se le convoca a una audición para la puesta en escena de la comedia musical Los fantásticos, que protagonizó con Sergio Catalán, Rubén Cerda y Moisés Suárez.
“Ello implicó una gran apertura, se me abría un mundo de posibilidades, porque la verdad no quería estar en los pasillos de Televisa tocando puertas. Ahí empecé a hacer teatro, ahí me empecé a desarrollar como profesional”.
Cuando retoma la televisión participa en Pueblo chico, infierno grande; Serafín, sentimientos ajenos y El privilegio de amar. Después la vida la pone a prueba, enfrenta una separación y se queda sola con su hija en brazos. “Mi ex pareja me apoyó, pero yo no he sido una mujer conformista y tenía que forjar mi propio camino, mi vida propia”, dice.
Marisol recuerda con un nudo en la garganta que el montaje de Regina, un musical en el que participó Lucero, ella se subía al escenario en los ensayos con su hija en brazos: “Isabella se sabía ya los temas… fue un momento muy intenso para mí, lo recuerdo con mucho orgullo porque pudimos hacerlo juntas”.
Al término de esta temporada y en plena labor de madre le llegó un segundo respiro, la telenovela Pasión, con la que su rostro y su carisma empezaron a generar una inercia en la que ya lleva varios años y que ahora la coloca en el momento más importante.
“Me acuerdo –dice emocionada-- que un día me encontré a Mónica Miguel en los pasillos de Televisa, me tomó del brazo, me llevó a hacer la audición y me quedé. Empezamos las grabaciones, pero me cambiaron de personaje y en una semana estaba yo en Colombia vestida de epoca y navegando en un barco”
Hoy empieza a preparar el personaje de una escritora con un perfil psicológico fuerte que se enamorará de uno de los miembros del grupo policial de élite y cuyo pasado detonara una trama interna digna de esta superprodución. Con ello la actriz tendrá la oportunidad de hacer algo que jamás ha hecho, de crecer y proyectar su carrera hacia otros derroteros.